ESTILO INDUSTRIAL
El estilo industrial, también llamado industrial chic, industrial moderno, en diseño de interiores es una tendencia estética que se remonta a mediados del siglo XX, probablemente en la ciudad de Nueva York con el movimiento de los apartamentos tipo loft en los años 60. El estilo ha vuelto a finales de la década de 2000 y sigue estando muy de moda desde entonces por una buena razón.
Características
Entre las paredes de ladrillo visto con techos altos y grandes ventanales, las vigas de madera desnudas y las instalaciones metálicas, el espacio abierto es generoso y aireado para tener todo en un mismo lugar, un lugar para cocinar y un lugar para comer, un lugar para dormir y un lugar para relajarse. Era muy diferente a otros estilos arquitectónicos y de decoración de la época y, aún así, su relajado encanto sigue vigente hasta hoy.
Su naturaleza cruda y honesta resulta especialmente atractiva para quienes desean desmarcarse de las tendencias modernas producidas en masa, ofreciendo un enfoque fuera de lo común que honra la historia y el valor del espacio, abrazándolo por lo que es. La funcionalidad y eficiencia originales de los que fueron almacenes, fábricas y otros edificios industriales se celebran y acentúan con el uso de la madera y el metal en el mobiliario, la iluminación y la decoración de estilo similar.
Los metales como el hierro, el cobre, las latas, el acero y el aluminio combinan perfectamente con el estilo industrial.
Las paredes desnudas, las instalaciones metálicas y los muebles sin pulir dan un fuerte carácter a un espacio vital.
“En los vagones y coches, el metal ha ido eliminando la madera. ¿Será lo mismo, un día más o menos lejano, en el mobiliario doméstico? ¿Veremos muebles totalmente metálicos...?”
Léon Déshairs, Arte y decoración, 1927
Origen y desarrollo de la arquitectura industrial
Los primeros espacios industriales se construyeron a finales del siglo XVIII, durante las primeras revoluciones industriales, con un único objetivo: la eficiencia y la seguridad. Debían ser sencillos, utilitarios y baratos para facilitar y agilizar el trabajo y reducir los costes de producción. Las paredes de ladrillo desnudo no ofrecían ningún adorno. La planta abierta con estructuras interiores estrechas economizaba el espacio utilizado por cada trabajador. Las grandes ventanas permitían la entrada de luz natural para ahorrar gastos de iluminación. La gran preocupación por la seguridad de un entorno de trabajo tan condensado frente a los incendios y las explosiones, propugnada por las compañías de seguros, también contribuyó a que los tejados fueran planos, las fachadas austeras y los espacios abiertos, sin ningún elemento ornamental, evitaran los huecos de las escaleras que flanqueaban los edificios y cualquier otro obstáculo durante la extinción de incendios.
Al final de la segunda Revolución Industrial, a principios del siglo XX, los nuevos avances tecnológicos y la nueva forma de producir energía, como la quema de carbón, hicieron que se exigiera una construcción actualizada de las instalaciones industriales. Gracias a Albert Kahn, uno de los arquitectos más influyentes en el diseño industrial, las plantas se beneficiaron de la introducción del hormigón y el acero.
Se respetan y aprecian las finiciones originales que muestran signos del tiempo.
En este mundo
En las décadas de 1920 y 1930, gracias a los modernos métodos de producción, el mobiliario metálico pasó a formar parte del paisaje urbano.
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Elementos de estilo
Todas las evoluciones arquitectónicas dieron como resultado el aspecto "inacabado" del suelo de hormigón desnudo, los ladrillos a la vista, los conductos visibles y las tuberías de hierro, que finalmente se han convertido en los personajes icónicos del estilo que ahora son muy queridos y apreciados.
- Distribución abierta con espacios creados por la colocación de los muebles
- Elementos estructurales y mecánicos expuestos: tuberías expuestas, tubos de ventiladores, vigas y postes de apoyo, y suelos de madera u hormigón
- Ventanas grandes y sencillas (a menudo del suelo al techo) para maximizar la luz natural
- Metal, madera y materiales naturales: latas, hierros, aceros, aluminio, cobres, piedras, maderas, cuero
- Paleta de colores neutros: negros, grises, blancos, marrones y tostados
- Mobiliario cuadrado, anguloso y en bloque, con algunas piezas llamativas y accesorios limitados
- Grandes elementos seccionales: esenciales para dividir, definir espacios y asegurar los flujos naturales
Muebles de estilo industrial
El mobiliario de estilo industrial debe su nombre a su propósito original, apoyar la funcionalidad y la producción en masa de la industria manufacturera. Fechado ya en 1760 en Gran Bretaña, su estilo se diseñó para ser sencillo, económico, práctico, fácil de producir, usar y mantener, y hecho para soportar las duras condiciones de los entornos de trabajo laboriosos. Era simplemente parte del trabajo diario. Sin embargo, hoy en día es muy apreciado por las mismas cualidades rústicas y crudas. Las principales características de los muebles de estilo industrial son:
- Funciones y formas bien casadas, lo viejo y lo nuevo, elementos "altos y bajos" combinados
- Reclamado o se ha creado a partir de muebles antiguos de fábrica
- Materiales en bruto con una pintura desgastada o una superficie sin pulir para dar una sensación de inacabado
- La artesanía se honra
- Enfoque respetuoso con el medio ambiente, ya que fomenta el uso de materiales reciclados o recuperados
Evolución del estilo
- Finales del siglo XIX - principios del XX - uso exclusivo en grandes fábricas
- instalación en el paisaje urbano
- Después de la Segunda Guerra Mundial - invitación al hogar
- Alta tecnología - desvíos y reinvenciones contemporáneas
Finales del siglo XIX - Principios del siglo XX - uso exclusivo en grandes fábricas
Los muebles industriales del siglo XIX están dedicados exclusivamente al uso de las fábricas. Los materiales son robustos y macizos y el diseño es sencillo y funcional. La madera y el metal son los principales materiales que se utilizan en el estilo industrial. Durante esta revolución industrial, un movimiento decorativo encontró su lugar con el lema: mantenimiento y adaptabilidad.
Los años 20 - 30 del siglo XX - instalación en el paisaje urbano
La democratización y el primer uso de los muebles de estilo industrial comienzan en el período de la posguerra. Eso fue posible gracias a las fábricas y a la adaptación del uso personal y doméstico de los muebles en metal. Hasta ese periodo las amas de casa preferían los muebles de madera. Como el cambio de los muebles de metal era bastante grande, al principio la gente ponía madera en las superficies de los asientos y los respaldos de sus muebles. Esto hacía que el contraste con los muebles de metal fuera menos fuerte y facilitaba la adaptación de la gente a ese estilo diferente de muebles.
Después de la Segunda Guerra Mundial: invitación al hogar
La democratización y el primer uso de los muebles de estilo industrial comienzan en el período de la posguerra. Eso fue posible gracias a las fábricas y a la adaptación del uso personal y doméstico de los muebles en metal. Hasta ese periodo las amas de casa preferían los muebles de madera. Como el cambio de los muebles de metal era bastante grande, al principio la gente ponía madera en las superficies de los asientos y los respaldos de sus muebles. Esto hacía que el contraste con los muebles de metal fuera menos fuerte y facilitaba la adaptación de la gente a ese estilo diferente de muebles.
Alta tecnología: desvíos y reinvenciones contemporáneas
La tendencia del estilo industrial high-tech deco desborda los lofts neoyorquinos de los años 80. Este estilo se extiende masivamente a través del nuevo uso de los antiguos muebles de taller. Debido al florecimiento del "high tech deco", el mobiliario contemporáneo adapta las características del estilo industrial. Por ejemplo, el hierro fundido, la chapa remachada y la pátina. Además, los muebles industriales se utilizan con un acabado moderno, y a menudo se les añade color, lo que marca la diferencia con los muebles industriales originales.
Comparación con otros estilos
Los artículos de estilo industrial suelen ser recuperados, reciclados y reutilizados, y muchos de ellos son piezas veteranas. Pero a diferencia del Shabby Chic, en el que los artículos vintage se elaboran con motivos y patrones florales, con curvas y ángulos redondeados, con suavidad y feminidad, el estilo industrial desprende un aire utilitario y sin complicaciones, con líneas rectas y formas claramente angulosas. Nada debe llamar la atención, ser exagerado o extravagante.
En este sentido, el estilo también debe distinguirse del minimalismo. Aunque comparte varios principios, como la concentración en la calidad sobre la cantidad, un número mínimo de accesorios, el estilo industrial puede emplear un enfoque mínimo, pero su fin no siempre resulta en una simplicidad contenida y austera. Puede jugar mucho con las texturas y los materiales sin ser pródigo ni sacrificar la calidez y el confort.